Me siento sola, aunque esté rodeada de gente.

Odio esto.

Odio este sentimiento de vacío.
Continuamente, intentar llenarlo con algo, y encontrar el apoyo en la comida.
Comer y comer, y luego darme asco. Demasiado asco.
Querer romper el espejo. Querer ser invisible al comprar, por no encontrar mi talla, que todos me miren y se rían.
Es horrible, me deprimo, y como más.
Es un puto círculo cerrado, y estoy harta de eso.

¿Mi vida?

Pues es como una escalera mecánica sin final.

Voy subiendo escalones, y cuando creo que he llegado arriba del todo, veo que hay un escalón más, y estoy tan agotada, que caigo.

Y entonces ya no tengo ganas de subir más. Tan solo quiero quedarme abajo y desaparecer de la vista de todos.

Quiero quedarme ahí, pero de repente, vislumbra alguien ahí arriba, y me parece tan maravilloso que deseo subir y conocerlo, y por el camino suena su voz, diciéndome que puedo, haciéndome sonreír, mostrándome que, quizá, la vida si merece la pena.

Pero cuando llego arriba, olvida que existí, que fui la persona que ayudó a llegar ahí arriba, y con su simple indiferencia me empuja hacia abajo y caigo, o quizá me tiro yo, no lo sé.

No tengo celos de esas zorras.

Lo que tengo miedo es que esas zorras te aparten de mí.

*Olvidar*

Lo siento, es imposible.

Fingir estar bien.

Cuando te mueres por dentro.

Y vuelvo a caer al pozo del que conseguí escapar.

Decepción tras decepción.

Mis indirectas están claras, ¿y las tuyas?

¿Sabes?

A veces te escribo como veinte 'te quiero' en WhatsApp...

Pero nunca me atrevo a mandártelos.

Imagina que vas a ir al concierto de tus ídolos.

¿Lo imaginas? ¿Imaginas esa sensación?

Pues eso es poco comparado con lo que me hace sentir un simple 'hola' tuyo.

¿Y qué quieres qué haga...?

¿...si lo primero que hago al encender el ordenador es mirar tu perfil?
¿...si no puedo evitar ponerme celosa de cualquiera que hable contigo?
¿...si soy tan cobarde que no soy capaz de decirte que aún te quiero?
¿...si me muero de ganas de saber que piensas?
¿...si ahora mismo atravesaría esta puta pantalla para besarte?
¿...si eres lo primero que aparece por mi mente al despertarme y lo último al acostarme?
No puedo hacer nada, no tengo valor.
O quizá es que espero que lo hagas tú.
Que recuerdes que existo aún, y que me muero por ti.
Cada vez que me conecto, lo primero que hago es abrir la ventanita de tu conversación y esperar impaciente que abajo aparezca un "escribiendo..."
La simple idea de que te acuerdes de mí primero me mata.
Si me dan taquicardias cuando te veo aparecer por mi TL.
Se me doblan las piernas cuando te veo.
No puedo, simplemente, no puedo evitarlo, estoy muy enamorada de ti.

Y cuando te quieres dar cuenta estás tumbada al lado del móvil...

...Esperando su mensaje como una idiota, sabiendo que nunca llegará.

No dejes que el mundo te coma.

Si alguien ha de comerte seré yo, y la boca.

Ella.

Ella va al colegio cojeando.
Le escuece el tobillo.
No se queja en ningún momento. ¿Su cara? Fría como el hielo.
Sonríe a los profesores e ignora los insultos en el recreo.
Todo sigue normal.
Menos Ella.
Menos su tobillo.
Menos su interior.

Gianlu, gracias.

"-Nadie se enterará que sufro, a nadie le importa. +Pues entonces debo ser nadie, porque esto me hace daño, y me preocupo por ti."
Gracias, de verdad, el mundo debería tener más gente como tú.
Por cosas así, merece la pena seguir adelante.

Intentan que me sienta culpable, alegando que no solo me hago daño a mí misma.

Os disteis cuenta tarde, lo siento.

El día que encuentre a mi alma gemela le pegaré un puñetazo, por tardar tanto.

A veces me siento como una enorme mezcla de canciones.

Ella.

Ella llegó a su casa y se encerró en su cuarto. Papá y mamá discuten de nuevo. Ella cierra los ojos e intenta imaginar un sitio en el que se sienta segura.
No lo encuentra.
De repente se siente extremadamente ridícula.
Llora.
Coge la cuchilla.
Coge su tobillo.
Y empieza a sangrar.

Ya ni pido ayuda, solo huyo, sola, como siempre.

A mí ya es imposible salvarme.

Esas personas que tienen esa puta manía de ser tan gilipollas.

Ella sigue siendo invisible. Él solo se fijó en Ella por aburrimiento. La ha traicionado. A hecho lo mismo que todo el mundo, al final si que era como todos los demás. Ella no llora, se encierra en su cuarto y empieza a reír. Ríe hasta que se queda sin voz. Se mira en el espejo y se da asco. Nada cambia.

Holi.

Pues nada, que después de tanto tiempo vuelvo a publicar por lo menos dos entradas, como normalmente.
Volveré con los "Ella" y demás.
Pues eso.
Un beso, Unicornia os quiere.